El presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Alfredo González, manifestó hoy la necesidad de acompañar la aprobación del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) como etapa inexorable en el ordenamiento de las finanzas argentinas y pidió “honrar los compromisos asumidos, más allá de la conveniencia, oportunidad y modo de contraerlos”.
Alfredo González en el plenario de comisiones de Presupuesto y Finanzas de la Cámara de Diputados
En el marco del encuentro convocado por las comisiones de Presupuesto y Finanzas de la Cámara de Diputados para conocer la visión de los titulares de las principales cámaras y centrales obreras sobre el entendimiento alcanzado por el Gobierno, el titular de CAME expuso un panorama sobre la situación actual de las pymes en todo el país e instó a los legisladores presentes a priorizar el desarrollo interno de la Argentina, “impulsado básicamente por las pymes, que son el motor y principales generadoras de trabajo en el país”.
“Es evidente que hemos aprendido del pasado reciente y somos la mayoría de los empresarios y empresarias que nos reunimos hoy acá conscientes de que la cesación de pagos no es una opción”, aseguró, y continuó: “Los compromisos asumidos, más allá de la conveniencia, oportunidad y modo de contraerlos, deben ser honrados. En ese sentido, CAME manifiesta hoy aquí la necesidad de acompañar la aprobación del acuerdo con el FMI como etapa inexorable en el ordenamiento de las finanzas argentinas”.
“No obstante esto -agregó-, debemos decir también que es prioritario para el país que el Gobierno ofrezca un plan económico sostenible y adecuado para el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas, balizando un camino de certidumbre para recrear la inversión en la Argentina”, y señaló que “no es ninguna novedad que las pymes representan la mayor fuerza generadora de riqueza de nuestro país, pero tampoco es novedad que a las pequeñas y medianas empresas todo nos cuesta más: nos cuesta retener el capital humano, nos cuesta acceder al crédito, nos cuesta la presión impositiva, nos cuestan las comisiones de los medios de pago, nos costó y nos sigue costando la pandemia”.
Durante el encuentro, González agradeció la oportunidad de acompañar a los diputados en “esta instancia difícil que nos toca atravesar ante un acuerdo al que no hubiéramos querido llegar”, y elevó un pedido para que “se convierta en la oportunidad para enfocarnos en lo que transforma en serio la vida de los argentinos y las argentinas: el trabajo”.
Por último, sostuvo que “el acuerdo con el FMI debe considerarse entonces una oportunidad para despejar dudas en el horizonte macroeconómico de la Argentina y reorientar los esfuerzos en la consolidación del mercado interno”, y reiteró, en sus palabras de cierre, que es necesario permitir a las pymes que puedan acceder al crédito para reinvertir en el país y al mismo tiempo “promover políticas laborales que no terminen asfixiando a las empresas que buscan abrirse paso en nuestra tierra”.